Toda historia creada puede despertar algo en nosotros. Para mi, la lectura fue el descubrimiento de nuevos mundos, en los que sin darme cuenta fui poco a poco encontrando mi reflejo. Los primeros libros que leí por mi propio gusto fueron todos los clásicos del género de terror, de autores como Poe, Lovecraft, Quiroga, Shelley, Stocker, King, etc. todas esas historias me fascinaron por que existía algo que hacía eco en mi interior y que despertaba al unísono sentimientos aparentemente opuestos como felicidad, tristeza, nostalgia, complacencia. Leer es evocar imágenes o por lo menos poder crear escenarios en nuestra propia mente.
Durante tiempo he trabajado precisamente en imágenes, que tienen que ver con obras que hace algunos años me marcaron y que por medio de la lectura me abrieron puertas a un entendimiento diferente. Un libro suele ser un compañero de experiencias, un asesor, un consejero, un distractor, un espejo… un libro para muchos de nosotros es el aprender a conocernos mejor, por ello lo que he trabajado va enfocado a los lectores que disfrutan tener siempre un libro a su lado.
Muy pronto tendrán noticias, estén al pendiente
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